Fármacos antimaláricos
La malaria puede tratarse con varios fármacos, como la quinina, la cloroquina, la mefloquina y la artemisinina. A pesar de que hay varios fármacos antimaláricos disponibles, la malaria sigue suponiendo una seria amenaza sanitaria debido a la velocidad que la que desarrolla resistencia contra estos medicamentos. Para vencer el problema de la resistencia, es esencial seguir desarrollando nuevos fármacos.