Bases y álcalis
Un álcali es una base que se disuelve en agua.
Tanto las bases como los álcalis son aceptores de protones. Por ello, a algunas bases también se las puede llamar «álcalis».
Por ejemplo, el hidróxido de sodio y el carbonato de sodio son bases que se disuelven en agua. Son álcalis.
Otras bases, como el carbonato de calcio, el óxido de cobre y el óxido de zinc, no se disuelven en agua, sino que deben disolverse en un ácido para que reaccionen con las moléculas de agua.