Cámara trampa
Una cámara trampa no solo es una herramienta utilizada para controlar el tráfico; los ecologistas interesados en la macrofauna también la usan.
La cámara es un sistema autónomo que graba vídeo o toma imágenes fijas cuando detecta movimiento, por ejemplo, cuando un ciervo u otro animal grande pasa por delante. Es ideal para capturar imágenes de animales tímidos, pero no tanto para cuantificar los ejemplares totales de una especie concreta.
Es una forma no invasiva de registrar la presencia de un organismo. Puede colocarse en cualquier lugar, aunque depende del propósito con el que se coloque la trampa: ¿quieres saber qué animal frecuenta un cierto camino? ¿Ver si alguno entra en una madriguera o en una cueva? ¿O solo quieres ver qué animales están presentes en la zona?
Puesto que una cámara trampa detecta el movimiento, los lugares que presentan un movimiento constante, como los arroyos, son menos apropiados para este tipo de cámara. Si es necesario colocar una cámara en un arroyo o en aguas abiertas, se puede usar un sistema de vídeo con un software de reconocimiento de imagen para captar lo que pasa en el lugar, aunque este método suele ser más costoso.