Telencéfalo

El telencéfalo es la parte más grande y más superior del cerebro. Es la parte encargada de la percepción y la integración de la información sensorial, el control de las funciones motoras y funciones complejas como el lenguaje, la memoria y la personalidad.

Está formado por los hemisferios derecho e izquierdo. La superficie de los hemisferios está cubierta por una capa densa de 2 a 4 mm de materia gris, la corteza cerebral que envuelve la materia blanca del interior, formada por tractos que transmiten impulsos. Muy en el interior de la materia blanca, podemos encontrar también los núcleos basales, que son islas de materia gris.

La materia gris del SNC está formada sobre todo por los cuerpos celulares de las neuronas, mientras que la materia blanca está hecha sobre todo de axones mielinizados que le dan su blancura.

La superficie del telencéfalo tiene un aspecto arrugado, como de nuez. Los pliegues se llaman circunvoluciones y las hendiduras profundas entre ellas, cisuras; las más superficiales reciben el nombre de surcos. Muchos surcos, cisuras y circunvoluciones son puntos de referencia anatómicos importantes, como la cisura interhemisférica, que divide el telencéfalo en los hemisferios derecho e izquierdo. Estos hemisferios están conectados por un haz grueso de fibras axonales, el cuerpo calloso, que permite la comunicación entre los dos hemisferios.

Los surcos y circunvoluciones también pueden ayudar a localizar los cinco lóbulos de los hemisferios cerebrales: el frontal, el parietal, el occipital, el temporal y la ínsula.

Imagen 1. Estructuras del telencéfalo