Filtración glomerular renal
La primera etapa del proceso de filtración en el riñón tiene lugar en la estructura que se conoce como glomérulo, en la parte del nefrón que está en la corteza.
La sangre llega de la arteriola aferente a los pequeños capilares glomerulares que están dentro de la cápsula de Bowman. Como los capilares están aplastados entre dos arteriolas constrictivas, la fuerte presión hidrostática «empuja» el agua, los iones y otras moléculas pequeñas a través de una membrana de filtrado hacia el canal del nefrón y aún más allá, hacia el túbulo proximal. Este es un proceso pasivo, en el que la membrana actúa como una malla especial para facilitar la filtración de los metabolitos en el torrente sanguíneo.
La cantidad de líquido filtrado a través de la membrana glomerular en un minuto por ambos riñones es la tasa de filtración glomerular o TFG. El volumen de orina que se excreta depende directamente de la tasa de filtración glomerular; una tasa de filtración alta implica que un gran volumen de agua pasa a los túbulos y termina en el túbulo colector de orina.
Para dar una idea de lo eficiente que es la filtración glomerular, es importante señalar que los riñones de una persona media filtran hasta 180 litros al día, aunque el 99 % del agua se reabsorbe, lo que reduce el volumen normal de orina diario a 1-2 litros.
La TGM depende principalmente de la diferencia entre la presión a favor de la filtración (la presión que ejerce el pulso cardíaco y la arteriola de constricción) y la presión en contra de la filtración (la presión hidrostática con la que contrarresta el túbulo de la cápsula de Bowman). Esta diferencia se llama presión de filtración neta.
Para medir la tasa de filtración, también podemos basarnos en la pérdida de creatinina en el torrente sanguíneo. La creatinina es un producto derivado de los procesos metabólicos de los músculos; los riñones la filtran prácticamente en su totalidad para expulsarla a través de la orina. Al medir la concentración de creatinina en el plasma y en la orina, y teniendo en cuenta el volumen de orina, podemos estimar la tasa de filtración glomerular:
Esto es solo una aproximación, puesto que parte de la creatinina se secreta de manera activa en el nefrón y no como resultado de la filtración glomerular pasiva, lo que contribuye a la concentración final de creatinina en el gasto urinario.