De la latencia al movimiento
Este tipo de experimentos son métodos conductuales que evalúan la reacción de un animal ante un estímulo nociceptivo con el fin de medir su respuesta ante el dolor u otros estímulos. Es el método más común para cuantificar la nocicepción en modelos animales.
Se pueden realizar utilizando diferentes estímulos, como calor, frío o estímulos mecánicos o eléctricos. El estímulo se suele ejecutar en la pata del animal; el tiempo que tarda en apartarla es lo que se registra como «de la latencia al movimiento».
Cuando el animal se aparta, significa que se ha disparado un potencial de acción en sus nociceptores, lo que transmite la sensación de dolor que le hace mover la pata. Así, cuanto mayor sea el tiempo transcurrido entre la latencia y la respuesta producida, menos susceptible es el animal a ese estímulo nociceptivo.
Estos experimentos son útiles para probar la capacidad de nuevos medicamentos para reducir el dolor frente a estímulos que podrían usarse en seres humanos en el futuro.