Extracción de pigmentos
Para garantizar la extracción intacta de los pigmentos, hay que manipularlos con cuidado. Los carotenoides, por ejemplo, son sensibles a la luz, al calor, al oxígeno, a los ácidos y a las bases alcalinas.
Se pueden utilizar varios métodos, pero la manera más fácil de extraer los pigmentos es mediante la centrifugación. ¡Hay que distribuir el peso de forma uniforme en torno al rotor para garantizar que la centrifugadora esté equilibrada!